Estando en la Isla de Pascua es probable que suene un poco redundante hablar sobre una cena en el fin del mundo. Muchos pueden pensar que cenar aquí, sin importar el lugar, ya es en sí misma una cena en el “fin del mundo”. A quien piense eso no le falta razón, ya que la isla es uno de los lugares más apartados del planeta, sin embargo, en este caso me refiero a un lugar en particular en Hanga Roa, el restaurante Au Bout du Monde que en francés significa exactamente eso: En el Fin del Mundo.
El local es acogedor, decorado con una armoniosa combinación de celestes y marrones y donde predomina la madera. Nos han asignado una mesa junto a la ventana desde donde podemos contemplar el océano, para cuando llegamos ya se ha hecho de noche pero si fuera más temprano sería un excelente lugar para disfrutar de la puesta de sol. Sin más preámbulo empezamos la velada con un pisco sour, nos han dicho que es uno de los mejores de la isla así que no podemos dejar de probarlo. La verdad es que el pisco sour del Au Bout du Monde es toda una delicia, absolutamente frío y con un sorprendente aroma a limón que se percibe en todo su esplendor al beberlo gracias a unos pequeños trozos de ralladura de la cáscara de la fruta que coronan el coctel. Un toque poco común que lo hace delicioso.
Las opciones de la carta son variadas pero ya que estamos en una pequeña porción de tierra rodeada de un maravilloso mar, nos decidimos por pescado. Empezamos con un Tartar de Atún para compartir, la presentación es impecable, el pescado fresco está cortado en pequeños trozos acompañados de aceitunas, pimiento rojo y alcaparras picados y suavemente aliñado con aceite de oliva y ali-oli. Además de pan tostado, el tartar está acompañado por finas hojuelas de camote (patata dulce) fritas que le dan un toque muy rico.
Como platos de fondo hemos elegido el Atún a la Vainilla de Tahiti y los Camarones al Jengibre con Leche de Coco. La cocina del Au Bout du Monde es delicada, cada plato está preparado con esmero y presentado de manera impecable. La vainilla de Tahiti sorprende por su intensidad de aroma y sabor y combina perfectamente con el atún, un gran trozo cocino vuelta y vuelta para no perder su sabor. En cuanto a los camarones están hechos en su punto, lo que es de agradecer porque en algunos lugares tienen la mala costumbre de cocinarlos en exceso dejándolos duros y secos; la leche de coco y el jengibre forman una rica crema perfecta para comerla con el arroz blanco que acompaña el plato.
El Au Bout du Monde fusiona la cocina polinésica con la francesa y la gastromía típica de Rapa Nui y por lo que hemos podido comprobar, ha logrado sacar lo mejor de las tres.
Y como ninguna cena está completa sin un postre, nos decidimos por dos clásicos: el Mousse de Chocolate y la Crème Brûlée. Ambos están muy buenos, el chocolate del mousse es intenso y con el toque preciso de dulce, pero sin duda la Crème Brûlée es imperdible, aquí también el ingrediente principal es la vainilla de Tahiti y eso hace la diferencia.
Definitivamente la cena en el Au Bout du Monde ha sido especial, el lugar es hermoso, la atención atenta y esmerada y la comida una delicia. El restaurante no está en el centro de Hanga Roa sino en la costa, en la bahía de Hanga Vare Vare, pero el lugar es tranquilo y perfecto para dar un paseo ya sea de día o de noche. Un restaurante absolutamente recomendable.
Dirección: Av. Policarpo Toro s/n
Teléfono: +5632 2552060
Horario: Miércoles a Lunes de 12:30 a 15:00 h y de 18:30 a 22:30 h
Sitio Web: www.facebook.com/auboutdumonde.rapanui
